domingo, 5 de junio de 2016

El retroceso de Chile

Por: Andrés Guzmán Escobari

El incidente por la "base militar patrulla Cariquima" que Chile pretendía instalar a 15 Km. de la frontera, develó nuevos aprestos bélicos de nuestro vecino que fueron denunciados a tiempo por Evo Morales.
La Base Militar Patrulla Cariquima. Fuente: El Deber.
La reciente controversia generada por el establecimiento de una base militar en Cariquima, Chile, a 15 kilómetros de la frontera con Bolivia (29 kilómetros en carretera), ha provocado reacciones contradictorias e insólitas en el país del Mapocho, que luego fueron complementadas con un notable retroceso. 

En efecto, en un primer momento, el Ministerio de Defensa y la Cancillería de Chile, reaccionaron reconociendo y desconociendo respectivamente, la existencia de dicha base militar. Por una parte, el ministro de Defensa, José Antonio Gómez, quien alguna vez se manifestó a favor de dar a Bolivia una salida soberana al mar, hizo unas declaraciones en las que confirmó el refuerzo de la seguridad nacional de su país con "la base militar patrulla Cariquima” donde, según él mismo, se tenía previsto establecer un sistema antiaéreo de misiles tierra-aire (M1097 Avenger). Por otra parte, tras la previsible protesta de Evo, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile publicó un comunicado de prensa que, a tiempo de aclarar que se trataba de una "intensificación del patrullaje militar”, señala textualmente: "No existe tal supuesta instalación militar”, "es totalmente infundada la acusación del Presidente boliviano de que Chile habría instalado una base militar ‘ilegal’ a menos de 15 kilómetros de la frontera con ese país, en la zona del Río Silala”. 
Mensajes contradictorios de los ministerios chilenos que el mandatario boliviano puso en evidencia rápidamente y que mostraban una clara intención por asociar el asunto de la base militar con el Silala.
Unos días después, y de manera insólita, la alcaldesa de Antofagasta, Karen Rojo, respondió al Presidente boliviano, posiblemente con el aval de su Cancillería -ente encargado de la política exterior chilena-, para mandar a callar al Mandatario boliviano y acusarlo de muchas cosas, entre ellas, como lo había manifestado la Cancillería, de haber dicho que la base militar de Cariquima estaría "cerca del Silala”, cuando lo que dijo Morales es que está cerca "de la frontera”. En este punto cabe destacar que las autoridades chilenas, con ayuda de las redes sociales y de algunos medios de comunicación, lograron instalar la percepción, incluso en Bolivia, de que las denuncias de Evo Morales estarían relacionadas con la controversia por los manantiales del Silala, cuando la protesta de Morales, tal como se puede verificar en sus declaraciones, se refiere exclusivamente a la base militar que Chile tenía previsto instalar en Cariquima sin haberlo comunicado a Bolivia, tal como indican los acuerdos sobre la materia y como aconseja la prudencia en estos casos en los que cualquier movimiento militar puede generar comprensibles suspicacias. 
Imagen satelital de Cariquima (a 15 km de la frontera) , Fuente: Google erath
Y si bien no debemos mezclar el tema del Silala con la decisión de instalar una base militar cerca de la frontera, tampoco podemos descartar que el anuncio boliviano de acudir a la justicia internacional para resolver el problema del Silala haya motivado el "aumento” del "patrullaje” militar chileno cercano a la frontera. 
Al respecto, en los últimos cinco años, se ha hecho evidente que las denuncias que ha venido haciendo Evo Morales sobre: 1) el exagerado armamentismo de Chile; 2) las minas antipersonal y antitanque que mantiene enterradas en su lado de la frontera; 3) los ejercicios militares que realiza anualmente el Ejército de ese país cerca de Bolivia y Perú;  y 4) ahora, el establecimiento de una base militar también muy cercana de nuestro territorio  revelan una clarísima y manifiesta intención de mostrar al Gobierno de La Moneda tal como es: socialista y pacifista en el discurso, pero neoliberal y militarista en la práctica. De hecho, a pesar de que la diplomacia chilena se ha esforzado en los últimos cinco lustros por limpiar la mala imagen internacional que le dejó la dictadura de Pinochet y lo han logrado en buena medida, hay que reconocerlo,  todavía no ha dejado de lado su deplorable política de disuasión (Estrategia Nacional de Seguridad y Defensa 2012 – 2024), que se fundamenta en el paradigma que ha guiado el accionar de Chile históricamente: "por la razón o la fuerza”.      
Pero lo que más llama la atención es que aun cuando las intenciones del Presidente boliviano son claras y manifiestas, las autoridades chilenas siguen sin comprender que su política reactiva, que ahora se manifiesta en reacciones contradictorias e insólitas, ha contribuido poderosamente a levantar más polvo sobre toda esta controversia boliviano-chilena que es precisamente lo que busca Evo Morales con sus denuncias, mostrar  al mundo que Chile es un mal vecino. 
En este aspecto, Evo Morales, principal conductor y único ejecutor de la política exterior boliviana, ha logrado marcar el ritmo de las relaciones con Chile, interponiendo demandas (CIJ, Aladi), anunciando más procesos judiciales y capitalizando cada movimiento militar chileno en favor de sus pretensiones político-estratégicas. Al otro lado, la diplomacia chilena, que en orden de importancia se halla representada por el Canciller, el Agente de Chile ante la Corte Internacional de Justicia, la Presidenta, el Ministro de Defensa y últimamente, la Alcaldesa de Antofagasta,  no ha logrado contrarrestar ni jurídica, ni política  ni comunicacionalmente lo hecho por el mandatario boliviano.     
Karen Rojo, Alcandesa de Antofagasta, Fuente: YouTube
En este selecto grupo de la diplomacia chilena se podría incluir a la subsecretaria de Defensa, Paulina Vodanovic, que fue la encargada de manifestar, a nombre de su gobierno, unas palabras que confirmaron implícitamente el retroceso de establecer una base militar a 15 kilómetros de nuestro país. En efecto, la citada autoridad informó desde Cariquima, donde llegó en un avión militar Hércules (Cariquima cuenta con una pista de aterrizaje a pesar de tener tan sólo 80 habitantes) acompañada de una comitiva de diputados y periodistas: "Esto no es una base militar. Lo que hay aquí son labores propias del Ejército, en un número de 12 personas y de apoyo a la comunidad”. Lo cual, naturalmente fue celebrado por Morales, que aprovechó la ocasión para saludar "el retroceso de instalar una base militar en la frontera con Bolivia y Perú” y dijo que espera que sea el "mensaje de la presidenta Bachelet”.  
Efectivamente, aunque las autoridades chilenas difícilmente reconocerán el retroceso y mucho menos que lo hicieron por las protestas de Morales, es importante que lo hayan hecho porque nuestros problemas no se resolverán con despliegues militares ni políticas de disuasión, sino con esfuerzos sinceros por cumplir lo acordado de buena fe y con políticas de buena vecindad.
   


4 comentarios:

  1. Andrés deja de llorar y hacer polémica por una base INEXISTENTE que no es mas que 5 containers, 2 para dormitorios, 1 como cocina, 1 para comunicaciones y 1 para bajo, custodiado por solo 15 efectivos, si para ti eso es base pues deja que no riamos de ti, estuviste en Chile donde te entrevistaron por el tema y ahora escribes como si Evo te hiciera fondo para defender sus imbecilidades apoyadas por el idiota de Ferreira, YO AUN SIGO ESPERANDO VER LOS MISILES Y TANQUES ¿a que hora lo muestran?, difícilmente un boliviano va a reconocer que su presidente necesita hacer polémica, ahora tu designas lo que dice la gente en Chile, deja de defender al idiota que tienen de presidente y deja de buscar fama aprovechando la coyuntura, la próxima vez ojalá que tu presidente no salga a ladrar diciendo que tenemos "armas nucleares", el puesto de Cariquima le molestó porque le arruina el negocio de robos y narcotráfico....

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  2. 1.- Según consigna el sitio web boliviano ejutv http://eju.tv/2016/05/sepan-los-pueblos-del-mundo-instalacion-base-militar-chilena-15-km-nuestra-frontera-tuits-evo/, el medio de prensa boliviano Erbol habría publicado la siguiente información: “El presidente Evo Morales aseveró este domingo que Chile incurrió en una “agresión a Bolivia” al instalar una base militar ilegal cerca a la línea divisoria entre ambos países y el manatial del Silala.”.

    2.- Por qué motivo las autoridades bolivianas, Morales, Choquehuanca, y Ferreira, no individualizan el Tratado y los artículos del mismo que impedirían el establecimiento de la base chilena? Simplemente porque no existe tal tratado.

    3.- Por qué Chile tendría que ser considerado con Bolivia, si esta última no lo fue al instalar el puesto militar a 1,5 kilómetros de la frontera en la zona del Rio Siloli o Silala? Por qué el supuesto tratado impediría a Chile hacer lo mismo que hizo Bolivia?


    sigue...

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  3. sigo:

    4.- El supuesto aval de la Cancillería chilena a la conducta de la Alcaldesa de Antofagasta es ciencia ficción, pues como autoridad electa por sufragio popular la Alcaldesa no tiene superior jerárquico dentro de la Administración del Estado.

    5.- Las minas terrestres constituyen un medio o elemento defensivo, disuasivo, pues nadie puede racionalmente justificar que sean un elemento o medio de ataque de un estado a otro, toda vez que su finalidad es disuadir, impedir o por lo menos dificultar el accionar militar de un estado contra otro. Por lo anterior, cabe preguntarse el verdadero motivo por el cual a Bolivia le molesta tanto que Chile haya instalado minas en territorio chileno, toda vez que lo hizo no solo conforme al derecho internacional vigente a la fecha de su instalación, sino que en función de conflictos reales que tenían serios visos de concluir en enfrentamiento armado; conflictos a los que se han referido ex comandantes en jefe del Ejército argentino como el ex vicecanciller peruano J Eduardo Ponce Vivanco, quien admitió la existencia de un acuerdo entre Argentina Bolivia y Perú para enfrentarse a Chile en los 70.

    6.- No solo un abogado, una persona con formación jurídica, sino que también quien haya tenido buenas clases de cultura cívica o política, estaría en condiciones de comprender que la frase “por la razón o la fuerza” solo se limita a poner de manifiesto una realidad que es propia a todo sistema jurídico, la existencia simultánea de una norma (emanada de la razón) y del poder (el imperium) de hacerla cumplir incluso por la fuerza a aquellos que pretendan desconocerla.

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    1. Un boliviano jamás va a saber el origen del lema "por la razón o la fuerza" que es producido en la década de 1810 dentro del proceso de independencia, su significado y valor tienen una definición clara, pero un boliviano prejuicioso que supedita contexto posteriores quiere modificar la historia del lema ¿crees que Andrés va a saber o reconocer eso? es igual que todos, no saber del lema chileno es no saber historia, no les pidas algo que los supera.

      ´Buena definición

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