El principal obstaculo que efrenta el comercio marítimo boliviano es la insuficiente e inadecuada intraestructura disponible dice el autor.
Por: Daniel Agramont Lechin
Publicado en La Razón
Puerto de Arica, Fuente: La Razón (2015) |
En las últimas
dos décadas se ha producido un aumento en el reconocimiento de la situación
especial que enfrentan los países sin litoral. Tanto en la academia como en
organismos internacionales, existe consenso sobre los efectos negativos que
tiene la mediterraneidad para el desempeño económico de los países. Una de las
conclusiones más claras es que la falta de acceso a costas soberanas tiene el
efecto consiguiente de limitar el crecimiento. Como afirma un estudio de la
Comisión Económica para el Asia y el Pacífico, “los países en desarrollo sin
litoral (PDSL), son confrontados con una serie de restricciones especiales que
inhibe su participación en el proceso de globalización” (ESCAP, 2003:1)[1].
Varios estudios que
profundizaron el tema encontraron que la variable que mayor significancia ha
demostrado es la infraestructura física. En uno de los estudios seminales Behar
y Limao[2]
(2001) encuentran que para los países sin litoral la infraestructura explica el
60% de los costos de transporte. Además, Limao y Venables[3]
determinan que una mejora en la infraestructura puede aminorar hasta en dos
tercios las desventajas asociadas a la mediterraneidad.
De acuerdo a la
ESCAP (2003:4) el problema específico que se enfrenta es que, “por a su falta
de acceso a los puertos marítimos y el costo prohibitivo de carga aérea, los PDSL
tienen que confiar en el transporte de mercancías por vía terrestre a través de
uno o más países vecinos. Los costes adicionales que origina junto con los
problemas de distancia, hacen más costosas las importaciones y exportaciones
hacen menos competitivas, poniendo así los países sin litoral en desventaja en
la economía mundial.”
En el caso de
Bolivia, por los motivos anteriormente expuestos, la aceleración de la
globalización, se presentan más como un reto que como una ventaja. Tomando en
cuenta la importancia de la infraestructura para reducir los costos de
transporte e incrementar el comercio, el obstáculo más grande que enfrenta el
comercio boliviano son sin duda los puertos para conectarse al mundo. Si bien
se tienen retos para mejora en cuanto a carreteras, el nudo actual para los
flujos comerciales son los puertos que el comercio boliviano utiliza en
terceros países. Esto debido a la gran cantidad de trabas que imponen y aumento
consiguiente de costos y días en el circuito logístico.
Tanto para
exportaciones como para importaciones, Bolivia se comunica al mundo casi en su
totalidad por puertos del norte de Chile, principalmente Arica, Antofagasta y
en menor medida Iquique. A pesar de que en Chile se especula mucho sobre el
tema, existen dos motivos claros que explican por qué los flujos de comercio
exterior utilizan estos circuitos. En primer lugar, es innegable la importancia
del factor geográfico: son los puertos más cercanos. Arica siempre fue el
puerto natural de Bolivia y actualmente, tomando en cuenta todos los puertos
posibles tanto en el Pacífico como en el Atlántico, y también los nueve
departamentos de Bolivia, no hay ninguno que esté ubicado a menor distancia. En
segundo lugar, resultado de esta cercanía, durante décadas se conectó al país
con infraestructura que tenía como objetivo facilitar la llegada al Pacífico.
Entonces, no es raro que actualmente la mayor red de conexión interna sea hacia
Puertos de este territorio. Si bien este no es el tema de análisis, es preciso resaltar
que esta búsqueda durante décadas de mejorar la conexión de Bolivia con el
mundo, hizo que se tenga una dependencia extrema de tránsito y esto, desde un
punto de vista geopolítico, fue un gravísimo error.
Analizando ya
los puertos mencionados, encontramos que efectivamente la carencia de infraestructura
se ha tornado cada vez más problemática, dado el crecimiento exponencial del
país en los últimos años y que vino acompañado de un igual aumento del comercio
exterior. La privatización de los puertos en Chile no hizo más que agudizar el
problema.
Respecto a
Arica, tenemos que mencionar que este es el puerto que tiene la mayor cantidad
de comercio exterior boliviano, además de la mayor diversificación de
productos. En 10 años casi se triplicó
el flujo de carga boliviana (1.137.252 tn en 2005 a 3.068.322 en 2015) y esto
no ha venido acompañado de inversiones que permitan un movimiento de carga
eficiente. La privatización que tanto reclama Bolivia, y que es contraria al
régimen de libre tránsito que establece el Tratado de 1904, entregó las
operaciones del puerto a un operador monopólico con un contrato de 30 años que
le obligaba a invertir en el puerto, pero resulta claro que las inversiones son
marginales e insuficientes.
Lo que sucede actualmente es que ya son cinco años
que el puerto está saturado por falta de inversiones en ampliaciones y compra
de maquinaria adecuada. Esto es algo que el operador privado reconoció al
Estado Boliviano en varias oportunidades, así como la empresa estatal EPA en ALADI.
Si bien se tienen meses en que los flujos de carga son menores, la mayor parte
del año los despachos y recepciones sufren varios días de retraso. En el caso
de las exportaciones, los camiones son forzados a esperar un promedio de 5 días
para recién ingresar a puerto y realizar el descarguío. El publicitado problema
del cierre de los garajes es sólo una pequeña muestra de los problemas que se
suscitan por falta de infraestructura.
En el caso de
Antofagasta la situación es peor. Desde 1998 el Estado chileno inicia el
traslado de las operaciones para los minerales a un recinto extraportuario a 35
Km. de distancia del puerto. En la práctica esto significó aumentar un eslabón
más en el circuito logístico y por lo tanto un incremento en los costos. A
partir de este hecho, poco importó la eficiencia que permitía el uso del ferrocarril
en todo el trayecto. Específicamente estamos hablando de un aumento en los
costos de transporte de 30% para el cinc a 50% para la plata y el plomo. Para complicar más la
situación, este recinto tiene únicamente capacidad de almacenaje para 9000 tn y
eso complica a las empresas mineras bolivianas porque no pueden llenar los barcos
graneleros que contratan dado que sobrepasan esta cantidad. Y lo más
controversial es que actualmente sí se están realizando las inversiones en
infraestructura pero únicamente para un proyecto minero chileno que tendrá su
depósito dentro del puerto.
El resultado de
lo que sucede en ambos puertos es un aumento no sólo en costos monetarios sino
también en varios días extra a la cadena logística. Para entender la magnitud de
los datos anteriores podemos citar a un estudio del Banco Mundial del año 2006[4]
que encuentra que cada día adicional que demora el transporte internacional,
reduce los flujos de comercio del país en 1%. Entonces, no nos resulta extraño
que Limao y Venables (1999) hayan encontrado que los PSL comercian 60% menos
que un país de similares características y que sí tiene acceso soberano al mar.
Ante la situación anterior se evidencia que una
de las principales preocupaciones para el Estado boliviano -hasta poder contar
con acceso soberano a costas marítimas- debe ser el mejorar el acceso a puertos
para sus flujos comerciales y así mejorar la eficiencia para conectarse al
mundo. Esta es una prioridad nacional y que debe ser realizada de dos formas
paralelas. Se debe seguir insistiendo en el cumplimiento del régimen de libre
tránsito por parte del Estado chileno, pero además buscar una vía alternativa de
conexión al océano Pacífico y que indefectiblemente será por el sur del Perú.
[1] ESCAP (2003). Transit and trasnport
issues in Landlocked and transit developing countries
[2] Behar y Limao (2001). Transport
Costs and International Trade. Universidad de Oxford
[3] Lima y Venables (1999).
Infrastructure, Geographical Disadvantage and Transport Costs. Banco Mundial
[4] Djankov et. Al. (2006). Trading on
Time. Banco Mundial
Uds.los bolivianos sólo se dedican a tergiversar, denostar y agredir,y ahora le agregamos el lloriqueo eterno; si no les gustan los puertos chilenos váyanse a otra parte, así de simple. Porque es claro que Chile no funciona de acuerdo a lo que, incluso, de mala manera exige Bolivia. Los puertos son chilenos y el Estado de Chile instala como Administradores de Puertos a quién se nos dé la gana, en esto no hay ninguna vulneración al Tratado de 1904, porque Chile es soberano para nombrar sus autoridades, y no será Bolivia la que nos venga a enseñar como tenemos que gobernarnos.Eso como primero.
ResponderEliminarEs claro como el agua,que Bolivia pretende desprestigiar los puertos chilenos con miras a que fracase el corredor bioceánico de carreteras sur que, para dolor de Bolivia, ya está acordado con Brasil, Argentina y Paraguay, cosa totalmente diferente a lo que a diario informa el ministro Claros de Bolivia. Brasil ya desestimó el tren bioceánico,y las autoridades bolivianas insisten majaderamente intentando convencer de las "bondades del tren" con llegada a un único puerto peruano, algo totalmente inviable para el sector empresarial brasileño. Esta situación les pegará muy fuerte, pero a nadie le importará, porque han demostrado hasta la saciedad ser una nación INCONFIABLE en el más amplio sentido del a palabra, y con toda clase de problemas políticos internos y de infraestructura; un país que no ofrece seguridad alguna a las naciones vecinas no puede pretender alzarse como "gestora" de un proyecto en el que, además, partcipa....APENAS, como país de tránsito.
Reitero, si tienen tantos problemas con Chile, problemas que uds mismo se han generado con su incultura diplomática basada en el odio.......pueden largarse cuanto antes dónde quieran, nosotros estaremos felices de tenerlos lejos.
Un simple ciudadano chileno.
Brasil se suma al tren bioceánico que pasará por Bolivia y Perú y fortalece proyecto regional para llegar a mercados de Asia.
Eliminarhttp://la-razon.com/economia/Brasil-adhesion-bioceanico-Bolivia-Evo-Temer-acuerdos-frontera-seguridad_0_2832316780.html
Aquí les dejo la web de la Cancillería brasileña con los acuerdos ya firmados con Paraguay, Argentina y Chile, para la construcción del corredor bioceánico de carreteras,en los cuáles ya se está trabajando. Es cosa que lean y se informen. Bolivia NO EXISTE.
ResponderEliminarhttp://www.itamaraty.gov.br/busca?searchword=corredor%20bioce%C3%A1nico&searchphrase=all&lang=pt-BR
Brasil se suma al tren bioceánico que pasará por Bolivia y Perú y fortalece proyecto regional para llegar a mercados de Asia.
ResponderEliminarhttp://la-razon.com/economia/Brasil-adhesion-bioceanico-Bolivia-Evo-Temer-acuerdos-frontera-seguridad_0_2832316780.html
Hasta hoy, Octubre de 2019, a tres años de mi primer comentario de 2016m Brasil no ha movido un dedo por afianzar el moribundo y odioso corredor ferroviario de Evo Morales.
EliminarLes dejo a continuación información de prensa, de un reciente acto del Presidente de Brasil inaugurando con su homólogo de Paraguay un tramo importante del Corredor Bioceánico de Carreteras hacia puertos chilenos, cerrando por completo la alternativa del tren boliviano.
https://www.americaeconomia.com/negocios-industrias/presidentes-de-brasil-y-paraguay-lanzan-obra-para-construir-puente-fronterizo