Por: Andrés Guzmán Escobari
Publicado en la revista Realidad y Perspectivas de Chile (Julio 2019 N° 75)
Publicado en la revista Realidad y Perspectivas de Chile (Julio 2019 N° 75)
Evo Morales y Carlos Mesa en 2015, Fuente: La Razón
A menos de tres meses de las elecciones
generales en Bolivia, hay dos candidatos
con posibilidades de obtener la victoria, Evo
Morales del MAS-IPSP y Carlos Mesa de la
alianza Comunidad Ciudadana (CC). Si no
ocurre nada extraordinario, uno de estos
dos personajes gobernará la nación andina
y amazónica entre 2020 y 2025, cuando se
cumplan 200 años de su independencia.
Un asunto siempre presente en el proceso
electoral boliviano, aunque esta vez no tan
inserto en el debate, es el más que centenario
tema marítimo, que en Bolivia es casi como
una religión.
La menor consideración de este tema en
la campaña electoral se debe, sin duda,
al desastroso resultado obtenido en la
Corte Internacional de Justicia, donde
se desestimaron todos y cada uno de los
argumentos presentados por Bolivia en el caso
“Obligación de negociar un acceso soberano
al Océano Pacífico”. Esto tuvo un efecto
desalentador para todos quienes creímos, en
su momento, que aquel era un buen camino
para llegar al mar, incluidos Morales y Mesa,
con muy distintos niveles de responsabilidad.
Pese al desaliento, todos los partidos políticos
que se han manifestado al respecto en sus
planes de gobierno, tanto de derecha como
de izquierda, han dejado en claro que este
es un tema irrenunciable. Desde la alianza
derechista Bolivia Dice No que lo considera
como “una cuestión de interés permanente
e irrenunciable”, hasta el izquierdista MAS,
que afirma que “Bolivia continúa su lucha
irrenunciable y patriótica por una salida
soberana al océano Pacífico”.
Pero si bien hay consenso sobre la
irrenunciabilidad del tema, existen grandes
discrepancias respecto a las propuestas de solución.
Por ejemplo, mientras el Partido Demócrata
Cristiano descarta la vía diplomática y
plantea una “hipótesis de guerra”, la Unión
Cívica Solidaridad recomienda “recomponer
y restablecer relaciones bilaterales”.
Ahora, retomado el análisis de las
candidaturas con posibilidades de ganar,
tenemos al oficialista MAS ante la inevitable
necesidad de defender su obra, aunque ésta
no haya sido la que todo el país esperaba.
La opositora CC, tampoco se muestra muy
cómoda con el tema, debido a que su principal
candidato tuvo un papel destacado, aunque
no determinante, en el fallido intento de
obligar a Chile a negociar un acceso soberano
al mar.
Así, el programa de gobierno del MAS destaca
que, por primera vez en la historia, una Corte
Internacional, “reconoció que Bolivia nació
a la vida independiente con mar”; que ese
tribunal “reafirmó que ningún Tratado ha
resuelto el tema”; y que habría recomendado,
“continuar el diálogo para resolver el
enclaustramiento marítimo de Bolivia”.
Por su parte, Comunidad Ciudadana plantea adoptar “una política
exterior autónoma, democrática y plural,
respetuosa del derecho internacional” y “salir
de los alineamientos ideológicos para, de
manera pragmática, diversificada y siguiendo
el interés nacional, recuperar la capacidad de
diálogo político y diplomático en torno a los
valores de una agenda común”.
Considerando las diferencias en las propuestas de las dos opciones mejor posicionadas en las encuestas, podemos afirmar que el resultado de las elecciones
del próximo 20 de octubre, cuando se cumplan
115 años del Tratado de 1904, definirá entre
muchas otras cosas, cómo se abordará el
tema marítimo y consecuentemente, cómo se
desenvolverán las relaciones boliviano-chilenas.
La interpretación que hace el Mas de lo resuelto por la Corte de La Haya es tan falsa como la demanda misma planteada, veamos:
ResponderEliminar1º Es falso, una descarada mentira, emitida a sabiendas que el auditor tiene su razonamiento alterado (por la emocionalidad que desde pequeño se le inculcó, disfrazándolo de lo que no es, marinerito a bordo de buques de cartón) sostener que de acuerdo a la Corte su sentencia de septiembre de 2015 “reafirmó que ningún Tratado ha resuelto el tema” de la reivindicación maritima. Es falso porque dicho fallo de 2015 se dictó a propósito de la excepción de incompetencia planteada por Chile, en base al Pacto de Bogotá y al Tratado de 1904; y a raíz de ello, la Corte estableció en el punto 34 lo siguiente: “el asunto objeto de la disputa es si Chile está obligado a negociar de buena fe un acceso soberano de Bolivia al Océano Pacífico y, si esa obligación existe, si Chile la ha incumplido.”. Respecto de ese objeto de la Litis, y no otro (como el que falazmente sugiere el MAS y el ex canciller Fernández) la Corte estableció, en su sentencia, que tal objeto no había sido resuelto por el Tratado de 1904, y para discutir acerca de ese objeto acepta la Corte ser un tribunal competente. En consecuencia, para la Corte No existe una disputa territorial entre Chile y Bolivia, NO existe un tema de límites pendiente que ambos Estados deban resolver.
2º También es falso señalar que la Corte en su fallo de octubre de 2018 recomendó que se continúe el dialogo; pues lo cierto, lo real, lo que sí dice la sentencia, es que lo resuelto por la Corte (rechazar la demanda boliviana) no debe mirarse como un impedimento para que las partes, Chile y Bolivia, continúen el dialogo, si es que ambos Estados lo desean (reconociendo que dialogar y negociar depende de la voluntad soberana). No hay entonces, en el fallo, ni recomendación, ni invitación, ni exhortación a dialogar ni a negociar, a diferencia de la mentira que esparce el MAS y sus adeptos. La derrota de Bolivia fue total.
3º El efecto de cosa juzgada los fallos lo generan respecto del objeto que ha sido materia del juicio, y no otro. El juicio entre Chile y Bolivia tuvo un objeto específico, la existencia de una supuesta obligación de negociar. No fue objeto del juicio determinar si Bolivia nació o no nació con mar, porque es un tema que carece de sentido jurídico, político y diplomático, desde el momento en que ya existe un Tratado de Límites entre Chile y Bolivia, el de 1904, cuya vigencia y validez ha sido reconocida expresamente por Bolivia, en 1943 por ejemplo. Instrumento que torna inútil toda reflexión al respecto pues, aunque llegara a ser cierto que Bolivia nació con mar, ello no va a afectar la vigencia ni la validez del Tratado vigente, ni generaría la obligación de tener que modificarlo, o la de tener que conceder acceso soberano a Bolivia al Pacífico.
Sr.Contardo:
EliminarLo lamentable de lo que ud.indica, es que una revista ligada a la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, le brinde un espacio a éste personaje fracasado intelectualmente, y que representa una las posturas ideológicas más radicales y anti-chilenas existentes en Bolivia, pueda continuar expresando falacias de la envergadura de las que ud. señala.
La Dra.Karen Longaric, una de las pocas voces autorizadas en Derecho Internacional en Bolivia, ya le cerró la boca a ambos personajes en un programa televisivo respecto de éste mismo tema, sin embargo, la estupidez y el descaro permanecen.
En estricto rigor, el artículo del señor Guzmán solo se limita a dar cuenta de la posición del Mas y del colectivo que sustenta la candidatura de Mesa, respecto del "tema" Mar, y uno no podría, por ese solo hecho, concluir que el señor Guzmán hace suyas esas posturas. De hecho, en alguna entrevista televisiva él ha admitido que la Corte no convoca, no llama ni insta a Chile y Bolivia a negociar, y que el gobierno de Morales se equivoca al hacer esa interpretación del fallo.
EliminarVi el programa en que participó la señora Longaric, al que Usted se refiere, El Pentágono, emitido el domingo 23 de septiembre, previo al fallo. Efectivamente la señora Longaric fue certera en sus opiniones, a diferencia del resto de invitados y del propio conductor, que también evidencio su ignorancia en lo jurídico y su apego irracional a los dogmas de la "religión" a que se refiere el señor Guzmán. pero el peor es el ex canciller Fernández, quien pese a reconocer que no es entendido en derecho Internacional, insistía en contradecir a la señora Longaric que sí lo es, respecto del correcto sentido y alcance del fallo de 2015, y del verdadero significado de la resolución de la OEA de 1979. También hay una buena entrevista a la señora Longaric hecha por Carlos Valverde https://www.youtube.com/watch?v=AwhjaMzwku0
Sr.Contardo:
EliminarSi, en rigor ud. tiene razón en lo que afirma, pero no olvidemos que éste señor siempre concordó en todo con la postura de Fernández, y si bien es cierto que en ésta oportunidad no acoge ninguna postura, ....tampoco repudia ninguna, ni siquiera la de la guerra que propone el PDC boliviano; es decir, en una revista de la Universidad de Chile, nada menos, muestra una faz de "altura intelectual" y la de una supuesta "imparcialidad" que, obviamente, no tiene; en ese video, previo al fallo, que ud.menciona, en que la Dra.Longaric le aclara a ambos personajes los conceptos jurídicos y los débiles fundamentos de la demanda, es notorio el rostro contrariado y malhumorado de Guzmán, y en otro video del programa "Esta casa no es hotel" dónde participaba también el muy correcto y mesurado historiador Sr.Robert Brockmann, el Sr.Guzmán hizo gala de su obcecada e intransigente postura de no cerrar éste tema con Chile, que, luego del fallo, es claro que sólo ha quedado el "cadáver de la aspiración marítima boliviana", como tan acertadamente se lo manifestó el propio Sr.Brockmann en un par de ocasiones.
Y con todo lo anterior, hay que tener claro que el Sr. Guzmán alega en contra de Chile, entre otras cosas, lo siguiente:
-Que no hay que reponer las relaciones diplomáticas con
Chile hasta tanto no se les de mar soberano;
-Que Chile viola permanentemente el Tratado de 1904 por diversas razones;
-Que Chile alteró el curso del río Caquena y por tanto la frontera con Chile;
-Que Chile alteró el curso del río Loa y usufructúa de todo su caudal;
-Que Chile desvió las aguas del río Silala
-Que Chile canalizó las aguas del río Silala sin autorización;
-Que Chile no respeta el libre tránsito producto de las huelgas del personal de los puertos;
-Que Chile violó el Tratado de 1904 al privatizar los puertos.
Quiero dejar meridianamente claro que mi posición en esto no tiene otro sentido que la de representar aquí, en éste blog en que se enloda a Chile entero, de mi cuestionamiento, mi objeción, a que una revista de la Universidad de Chile le dé tribuna a un señor que no la merece. Eso es todo.
Los ridículos saben que nunca llegarán al mar, pero como son cabeza de piedra, continuarán con la tontera......porque más me aprietan, más me arranco.
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